En el acelerado mundo actual, la necesidad de un espacio cómodo y bien iluminado para trabajar en casa es más crucial que nunca. Ya sea que tengas una habitación dedicada para trabajar o estés aprovechando un pequeño rincón del salón.
Trabajar remotamente en casa puede parecer aparentemente muy sencillo, solo necesitas una buena conexión a Internet y una computadora para trabajar, pero en realidad, para ser eficiente, el Smart Working debe organizarse con espacios y tecnologías adecuadas.
Un elemento principal capaz de mejorar la eficacia del Smart Working es sin duda el puesto de trabajo. Crear un entorno de trabajo adecuado, cómodo y ergonómico es de suma importancia. Gestionar la iluminación de un espacio dedicado al trabajo inteligente es un aspecto muy importante, de hecho la iluminación también determina nuestra productividad y ayuda a crear un ambiente agradable y confortable.
Para una correcta iluminación de las estancias de la casa dedicadas al trabajo inteligente, el equilibrio entre luz artificial y natural es uno de los principales aspectos a tener en cuenta, no siempre es posible contar con un nivel de iluminación natural suficiente para garantizar el confort visual. para no cansar la vista. En estos casos es necesario utilizar soluciones de iluminación artificial que compensen la luminosidad faltante equilibrando la luz directa e indirecta para obtener el confort visual ideal. Existen numerosas opciones posibles que se pueden utilizar para iluminar los puestos de trabajo, desde apliques hasta lámparas colgantes, pasando por focos LED.
De hecho, la iluminación ideal para un área de trabajo es una combinación de iluminación general y de acento. Para la general se recomienda una apertura del haz de luz superior a 90°, mientras que para la decorativa, un ángulo de luz inferior a 90°.
Un puesto de trabajo para trabajo inteligente debe incluir un tipo de luz uniforme con una temperatura de color no inferior a 4000 Kelvin para favorecer la concentración sin forzar la vista. De hecho, se ha demostrado que la productividad y la concentración pueden mejorarse con una luz blanca fría con un alto porcentaje de azul. Si hay poca luz natural también se puede utilizar una temperatura de color de aproximadamente 6500 Kelvin, para luz más brillante. En cuanto a la luminosidad, un valor de 500 lx (una bombilla de unos 1.000 lúmenes) es el ideal para trabajar, según las indicaciones proporcionadas por el fabricante. Norma europea DIN EN 12464-1 que se refiere a la iluminación interior de los lugares de trabajo.
Otro aspecto importante es el relativo al índice de deslumbramiento que surge del tipo de lámparas utilizadas en los espacios en los que se trabaja. El UGR (Unified Glare Ratio) es un valor que mide el deslumbramiento que produce un dispositivo al ojo humano. Según las recomendaciones de la norma europea EN 12464-1, se recomiendan valores UGR≤19 para espacios de oficina para garantizar un ambiente visual confortable, mientras que los ambientes con UGR fuerte, >28 se consideran visualmente molestos.
Las luces que se coloquen encima del puesto de trabajo no deben producir efectos de deslumbramiento o parpadeo, especialmente en el monitor del ordenador. Además de provocar distracciones, el deslumbramiento también tiene otros efectos negativos, que pueden favorecer la aparición de dolores de cabeza y fatiga. La luz LED es una solución ideal porque es más eficiente energéticamente y más duradera que cualquier otra tecnología de iluminación, tiene mejor rendimiento y reduce el riesgo de parpadeo. Para las estancias de la casa destinadas al Smart Working, es de absoluta importancia elegir soluciones lumínicas que, en función de las diferentes necesidades, aporten la luz suficiente para poder trabajar con el máximo confort visual.
Para quienes tienen poco espacio, transformar un rincón del salón en una mini oficina es una solución práctica. La clave del éxito es combinar funcionalidad y estética. Utilice una combinación de iluminación ambiental, de trabajo y de acento. Comience con una lámpara de pie ajustable como luz ambiental, complementada con una lámpara de trabajo en el escritorio. Agregue iluminación acentuada con apliques decorativos o luces colgantes para crear un ambiente acogedor.
El espacio de la cocina puede convertirse en un espacio de trabajo funcional con la estrategia de iluminación adecuada. Utilice luces LED debajo del gabinete o focos para iluminar el espacio de trabajo y luces colgantes o una lámpara de araña para brindar iluminación ambiental. Asegúrese de agregar un regulador de intensidad para ajustar el brillo, de modo que pueda adaptar la iluminación a las diferentes actividades del día.
Si tiene una habitación separada para la oficina de su hogar, tendrá más flexibilidad en sus opciones de iluminación. Considere una combinación de luces del techo (como luces empotradas o de techo) para iluminar la habitación y luces de trabajo, como una lámpara de escritorio o un riel LED ajustable, para enfocar la luz solo en el área donde se realiza la actividad.
Gracias a una buena iluminación del puesto de trabajo, es posible mantener el mismo nivel de productividad y comodidad que una oficina clásica, incluso en el trabajo inteligente.