La zona de entrada y el pasillo son espacios de la casa que se ocupan poco tiempo y se limitan al paso. Las elecciones de iluminación para iluminar estas áreas deben derivar principalmente de cómo estos ambientes se relacionan con el resto de la casa.
La zona de entrada es un espacio más reducido respecto al resto de estancias, para una correcta iluminación basta con garantizar una luz difusa y no invasiva de unos 200 lux mediante: plafones, empotrables o lámparas colgantes.
Si hay una consola o espejo cerca de la entrada, es recomendable utilizar apliques o lámparas de mesa para aumentar la cantidad de iluminación con luces de acento.
Si, por el contrario, la entrada se proyecta hacia otros ambientes con los que permanece vinculada visualmente, como el salón o la cocina, es posible crear una iluminación más viva y original utilizando tiras LED empotradas en el techo o en la pared y lámparas de suspensión para conseguir un punto focal.
El pasillo es esa estancia de la casa que sirve para conectar las distintas estancias y suele tener una forma alargada y estrecha. A menos que la casa sea de tipo espacio abierto, el pasillo casi siempre es un espacio donde no llega la luz natural y el problema que más se encuentra es la mala iluminación, por la ausencia de fuentes de luz directa como puertas o ventanas.
La correcta iluminación de un pasillo debe garantizar una luz aproximada de 150 lux para hacer el ambiente más agradable y acogedor.
Para la iluminación de zonas de paso, soluciones como tiras LED para colocar a lo largo del borde del techo o del zócalo, lámparas de pie, focos empotrables o con haz de luz orientable, apliques, plafones y lámparas de suspensión capaces de crear ambientes visualmente escenográficos.
Los focos empotrables son una de las mejores soluciones para iluminar el pasillo: son agradables a la vista y se adaptan a cualquier estilo. Más cómodos que los focos empotrados son los focos orientables, que se pueden mover y dirigen el haz de luz hacia donde se necesita.
Para una casa con un estilo de decoración moderno, es posible colocar muchas pequeñas luces LED en el techo para recrear una composición luminosa muy sugerente. Si la pared del final del pasillo queda libre se puede utilizar como instalación lumínica con luces que permitan potenciarla y transformarla en una pantalla de luz para el resto de la estancia.
Quienes aman el estilo clásico pueden utilizar apliques con una luz cálida y suave para iluminar el pasillo, sin embargo se recomienda integrar este tipo de iluminación con focos colocados en zonas estratégicas para encenderlos si es necesario. Los apliques deben colocarse en la pared lateral y también pueden usarse como elementos para crear decoraciones.
En el pasillo se pueden utilizar luces de acento sobre los cuadros y, en el caso de rincones sin amueblar, una excelente solución son las lámparas de pie.
Una solución diferente y muy interesante es iluminar la parte inferior del pasillo con luces empotradas en el suelo o a lo largo del rodapié, creando una auténtica guía de luces capaz de iluminar el camino de forma discreta pero muy eficaz.